Muchas de las cosas que ves cuando eres niño permanecen contigo…Pasas la mayor parte de tu vida intentando asimilar esas experiencias, Tim Burton

Un principio, una historia, una fábula contada por una abuela a su nieta, un aprendizaje basado en los recuerdos.  ¿Conocemos la diferencia entre magia y lo mágico?. La magia es un arte, lo mágico es algo único e irrepetible, tan difícil de encontrar cómo un trébol de cinco hojas,  como un elefante albino, o como la bondad o inocencia de un niño en la mente de un adulto.

Edward, interpretado por el genial Johnny Depp, es un ser auténtico en búsqueda de su identidad y de su camino en un mundo, el que vivimos, en búsqueda de un imaginario perfecto cuando la perfección no existe. «Suburbia» representa nuestra sociedad actual, consciente de su necesidad consumista para rentabilizar su sistema. Casas y maridos perfectos, coches estupendos, cuidado de la imagen y una absoluta falta de respeto por la diferencia.

Nacido bajo la creación de un robot y con un delicado corazón de galleta, solo Edward podía tener ese origen, es un artista, una persona exclusiva en sus gestos, en su manera de vestir, en sus emociones…y sobre todo en su forma de hablar y expresarse. Ha aprendido y vivido sólo, su fuente de inspiración, si la buscas, se encuentra en su corazón de galleta.

Sus majestuosas figuras, realizadas con sus manostijeras, se recrean en su cariñosa, inocente y entusiasta mente. Es una persona con talento, hay muchos libros que lo intentan definir, incluso dan recetas para poderlo gestionar, ¡que ilusos!. Me atrevo a decir que el verdadero talento, al igual que un río, busca su propio camino, su propio destino. Personalmente, si lo encuentro no pongo una presa sino lo acompaño, lo contemplo y lo admiro.

Esta es una historia, la de Edward, que no se cree pero que se entiende, os animo a volverla a ver, es la obra maestra de un genio como Tim Burton. Como dice Tim, “Edward es una imagen gráfica y sencilla, mirarle hace sentir una mezcla de emociones, tiene algo dentro que no encaja con su imagen exterior”.

Igual que empiezo finalizo con una frase de su abuela a su nieta:

¿Cómo sabes que sigue vivo? . No lo sé. Verás presiento que lo está. Antes de que viniera él no nevaba nunca, pero luego sí. Sino siguiera vivo ahora no estaría nevando. A veces aún bailo sobre la nieve.